La miopía es un trastorno de la visión en el que los objetos cercanos se ven claramente, pero los objetos alejados aparecen borrosos. La miopía se debe a una forma anormal del ojo, en la que el ojo es demasiado largo o el cristalino es demasiado potente. Esto hace que la imagen se enfoque en un punto delante de la retina en lugar de directamente sobre ella.

La miopía se puede corregir mediante lentes como gafas o lentes de contacto, o a través de cirugía refractiva, como la LASIK o el PRK. Es importante hablar con un oftalmólogo para determinar la mejor solución para cada caso individual de miopía.

Causas de miopía:

Hay varias causas que pueden contribuir a la miopía, incluyendo:

Heredabilidad: La miopía puede ser hereditaria, lo que significa que puede ser transmitida de padres a hijos.

Uso excesivo de la vista de cerca: El uso excesivo de la vista de cerca, como leer o trabajar en un ordenador por períodos prolongados, puede contribuir a la miopía.

Falta de luz natural: La falta de luz natural puede aumentar la presión ocular y contribuir a la miopía.

Edad: La miopía puede empeorar con la edad.

Aunque ningún procedimiento médico es perfecto, el láser del excimer permite un grado incomparable de precisión y predictabilidad. Cada pulso del láser puede quitar 39-millonésimos de una pulgada de tejido en 12-billonésimos de segundo. Esto le permite a un cirujano experimentado lograr una exactitud notable, manteniendo un excelente manejo de todo el procedimiento.

El procedimiento de LASIK requiere mucha habilidad técnica y entrenamiento para ser realizado apropiadamente, de ahí que deba escogerse al cirujano apropiado.

El procedimiento consiste en aplanar o aumentar la curvatura de la córnea, dependiendo de si se corrige miopía o hipermetropía, mediante un rayo de luz frío (láser), haciendo que los rayos de luz enfoquen en un solo punto sobre la retina y permitiendo ver las imágenes con nitidez.

Síntomas de miopía:

Dificultad para ver objetos lejanos: Los objetos alejados parecen borrosos y difíciles de ver con claridad.

Fatiga visual: La persona puede sentir fatiga visual después de leer o trabajar en un ordenador por períodos prolongados.

Dolor de cabeza: La persona puede experimentar dolores de cabeza debido a la fatiga visual y al esfuerzo por ver con claridad.

Visión doble: La persona puede experimentar visión doble o halos alrededor de las luces.

Sensibilidad a la luz: La persona puede sentirse más sensible a la luz brillante o deslumbrada por la luz brillante.

Soluciones para la miopía:

Hay varias soluciones para la miopía, incluyendo:

Gafas: Las gafas son una solución sencilla y efectiva para la miopía. Las lentes corrigen la imagen borrosa y permiten ver objetos lejanos con claridad.

Lentes de contacto: Las lentes de contacto son otra opción para corregir la miopía. Las lentes se colocan directamente en el ojo y se ajustan a la forma de la córnea.

Cirugía refractiva: La cirugía refractiva, como la LASIK, puede corregir la miopía al cambiar la forma de la córnea. La cirugía se realiza con láser y es una solución a largo plazo para la miopía.

Terapia visual: La terapia visual puede ayudar a fortalecer los músculos oculares y mejorar la visión.

Cirugía de la miopía:

Sí, existe una cirugía para corregir la miopía, conocida como cirugía refractiva. La cirugía refractiva se realiza para corregir problemas de refracción, como la miopía, hipermetropía y astigmatismo. La cirugía más común para corregir la miopía es la LASIK (Laser-Assisted In Situ Keratomileusis).

En la LASIK, se utiliza un láser para cambiar la forma de la córnea, lo que mejora la capacidad de la persona para ver objetos lejanos con claridad. La cirugía es rápida, segura y tiene una tasa alta de éxito.

Sin embargo, es importante hablar con un oftalmólogo para determinar si la cirugía refractiva es una opción adecuada para ti. El oftalmólogo considerará factores como la gravedad de la miopía, la edad y la salud ocular general antes de recomendar un tratamiento.